Partiendo desde la principal premisa de que la mejor edad es la que se vive en cada momento, lo cierto es que cada fase de la vida tiene necesidades y gustos concretos.
También a los 50 y 60 se sienten percepciones y preferencias muy específicas y diferenciadas de las que se sienten en otros momentos de la vida. Por ejemplo, a gran parte de nosotros nos gusta ya más el día que la noche; hacer ejercicio sin tener que competir con los más jóvenes; socializar sin tener que demostrar… Sin generalizar completamente, y sin que eso signifique no mezclarnos con los demás, los de 50 y 60 nos decantamos por cosas distintas de las que queríamos a los 20, a los 30, incluso, a los 40.
Por todo ello, en www.genteyold.com, vamos a buscar -y hasta organizar- planes de ocio que sean perfectos para nuestro momento.
