Gente Yold. Entrevista con el actor Eduardo Gómez
“Es fundamental tomarse la vida un poquito a cachondeo”
A veces le siguen llamando Mariano o Maxi, por sus papeles en Aquí no hay quién viva y La que se avecina, pero lo cierto es que Eduardo Gómez ha hecho mucho más que estas dos series. Su llegada al mundo de la interpretación fue de lo más imprevisible, pero encontró su filón, porque reconoce que disfruta haciendo reír al público. No te pierdas nuestra entrevista de hoy.
“Hablo y la gente se ríe”. Lo ha asegurado en varias ocasiones y la verdad es que no nos extraña. Eduardo Gómez, de 66 años, es una de esas personas que te sacan una sonrisa por el simple desparpajo con el que se expresan. Es una de las caras más conocidas de las comedias televisivas de los últimos años, gracias a su participación en series como Aquí no hay quien viva y La que se avecina, aunque lleva un tiempo retirado, disfrutando del sol y la buena vida de Marbella, donde reside. Se lo pedía el cuerpo tras más de diez años de una actividad especialmente frenética entre rodaje y rodaje de series y películas e incluso interpretaciones teatrales. Aun así, nos deja caer que este descanso le durará poco, ya que pronto empezará una película, aunque no nos deja tirarle demasiado de la lengua…
En el plató de La que se avecina
Eduardo cree en la filosofía de vida de dejar que las cosas pasen. Tanto, que si hoy es actor, es por una auténtica casualidad. Aquello de acompañar a un amigo a una audición y que al final le cojan a uno no es ninguna leyenda urbana, y es precisamente lo que le ocurrió a Eduardo. “No se creían que no fuese actor”, nos asegura. A partir de ahí, los directores no han cesado de llamarle y pronto cumplirá nada menos que 20 años de carrera.
Gente Yold: Eduardo, llevas algún tiempo retirado de la escena, ¿tienes algún proyecto profesional por delante?
Eduardo Gómez: -“Como bien dices, me he apartado un tiempo de la escena para descansar un poquito. Me considero afortunado de haber trabajado tanto los últimos años, pero también han sido muy duros, con un ritmo bastante fuerte y decidí terminar con La que se avecina y retirarme por un tiempo. Así que de momento es eso lo que estoy haciendo, disfrutar de la vida”.
Fui a un casting por casualidad y ya llevo 20 años sin parar de trabajar.
G.Y.: Efectivamente, te hemos escuchado decir en más de una ocasión que, tras una temporada de diez años de rodaje entre Aquí no hay quien viva y La que se avecina, tuviste que parar porque te notaste algo “quemado”, imagino que el público ve solo lo bonito de una serie, ¿es muy duro y cansado?
E.G.: -“Sí, es durito. Además, después enlacé también con la serie Gym Tony, que fueron dos temporadas. Es un ritmo fuerte de grabar-estudiar-grabar-estudiar… son muchas horas. Así que, después de nada menos que diez años decidí parar un poco y descansar”.
El actor nos confiesa que él se ve muy bien, con ganas de seguir trabajando
G.Y.: ¿Eres un yold en toda regla, con ganas de afrontar todos los proyectos que vengan o, en cambio, notas que tienes menos ganas según pasan los años?
E.G.: -“¡Yo me veo muy bien! Además, empiezo una película ya mismo. Todavía no puedo dar más datos, pero por supuesto que tengo todavía muchísimas ganas de trabajar”.
G.Y.: Sabemos que tu don para la interpretación no te vino de una forma tan vocacional, sino que fue más bien casual, ¿nos cuentas cómo fue?
E.G.: -“Fue totalmente producto de la casualidad. Acompañé a un amigo a un rodaje y me acabaron pidiendo a mí que dijera una serie de frases. Yo, claro, les dije que estaba simplemente acompañando a un amigo, que no me dedicaba a la interpretación, pero insistieron.
Cuando empecé se quedaron alucinados, no se creían que no fuese actor. De esto hace más de 20 años y desde entonces no he parado de trabajar”.
He tenido la suerte de aprender esta profesión trabajando, que es algo complicadísimo.
G.Y.: ¿Fue duro formarte como actor teniendo ya una edad?
E.G.: -“Yo he tenido la suerte de aprender esta profesión trabajando, que es algo complicadísimo de hacer, teniendo en cuenta la situación actual. ¡Y encima me pagaban! Sin duda, esta ha sido la mejor escuela de interpretación que he tenido: mis compañeros y captar de ellos todo lo posible, absorber lo máximo de todo lo que he ido viendo a mi alrededor”.
Con la grandísima Mariví Bilbao
G.Y.: Te ganaste el cariño del público especialmente con tu paso por Aquí no hay quien viva y La que se avecina, ¿qué han supuesto tantos años formando parte de estas series?
E.G.: -“Sobre todo muy buenos momentos y recuerdos inolvidables. También aprendí mucho de la profesión. Pero sobre todo, el cariño de todo el público, al que le encantó estas dos series. Ha sido una experiencia maravillosa”.
En el programa de televisión El Hormiguero (copyright El Hormiguero)
G.Y.: Eso es porque suponemos que, a pesar de haber dejado la serie hace ya algún tiempo, te sigue pasando a diario esto de que te paren por la calle, ¿cómo llevas esta parte?
E.G.: -“¡Tendrías que venirte conmigo a dar una vuelta! Pero es parte de nuestro trabajo, hay que tenerlo asumido, porque si no, se pasa mal. La gente es muy agradecida, especialmente cuando haces comedia: te dicen cosas, se quieren hacer una foto, te abrazan…. Yo procuro estar siempre a la altura, porque es gracias a esa gente que tenemos el éxito que tenemos“.
La gente es muy agradecida, especialmente cuando haces comedia: te dicen cosas, se quieren hacer una foto, te abrazan…
G.Y.: Hablemos un poco de los actores secundarios, esas caras que todos reconocemos, personajes muy queridos, pero quizá menos valorados por la industria, ¿es así? ¿os trata como os merecéis?
E.G.: -“A mí siempre me han tratado como me merezco, porque de eso me he encargado yo. Lo cierto es que a mí no me ha gustado ser protagonista de nada en mi vida y siempre he ido aceptando papeles sin importarme. Si eran secundarios o principales, me da lo mismo, nunca he tenido esa sed de ser protagonista”.
“Lo que me suele apetecer es que la gente se parta de risa conmigo”, nos asegura
G.Y.: Digamos que tu punto fuerte es la comedia, tienes una habilidad casi innata para hacer reír, ¿alguna vez has tocado otros palos? ¿te gustaría hacerlo?
E.G.: -“Bueno, si me llaman y me lo proponen, ¿por qué no? Pero la verdad es que yo estoy muy a gusto en comedia y lo que me suele apetecer es que la gente se parta de risa conmigo, no que lloren. Si lloran me agobio, a mí me gusta el buen rollo”.
Siempre he ido aceptando papeles sin importarme. Si eran secundarios o principales, me da lo mismo.
G.Y.: Se nota que te gusta el buen rollo, porque lo transmites con solo hablar contigo. ¿Darías un consejo a nuestros yolds para afrontar la vida con alegría y buen humor?
E.G.: -“Pues a las lectoras les diría que me llamen cuando quieran, a los lectores que ni se les ocurra, pero a ellas lo que quieran –bromea. Ahora en serio, es fundamental tratar de afrontar las cosas con alegría, con agrado y tomándose la vida un poquito a cachondeo. También saber ir toreando lo que va viniendo y pasito a pasito, como dice la canción”.
Más información:
Deja un comentario