Mundo Yold. La inagotable creatividad de Rabanne y su capacidad de experimentación
Paco Rabanne: el modisto que cosió metal
El pasado 18 de febrero se cumplieron los 90 años del nacimiento del genio de la alta costura, Paco Rabanne. Su estilo futurista inconfundible, sus creaciones con metal, sus perfumes… en fin, toda una nueva mirada de vanguardia y sutileza sobre la moda no se fueron con él; su legado continúa en su casa de París y en la retina de tantos admiradores de su estética rompedora.
Francisco Rabaneda Cuervo nació en la provincia de Guipúzcoa el 18 de febrero de 1934, hijo de la costurera jefa del diseñador Balenciaga y del coronel de las fuerzas republicanas, Francisco Rabaneda Postigo, que fue fusilado por las tropas de Franco en Santoña (Cantabria) en la Guerra Civil Española.
Su familia se tuvo que exiliar en Francia en 1936, concretamente en Morlaix y más tarde en Les Sables-d’Olonne.
Entre 1951 y 1953, el joven y ambicioso Paco estudió Arquitectura en la Escuela Nacional Superior de Bellas Artes de París, y terminó sus estudios tras haber dibujado miles y miles de audaces diseños de moda.
Con el nombre de Frank Rabanne firmó algunas de sus primeras creaciones que, en 1959, publicó Women’s Wear Daily. Una primera serie de siete vestidos ya presentaba las líneas geométricas que le hicieron famoso.
Su creatividad transcendía los soportes tradicionales de los modistas clásicos, y enseguida se atrevió sin miedo con el diseño de accesorios de todo tipo. Entre 1955 y 1963 diseñó los bolsos de la firma de Roger Model y el calzado para Charles Jourdan. Entre 1962 y 1966 fabricó artesanalmente accesorios de fantasía, como botones o bordados sin hilo ni aguja, para diseños de alta costura firmados por algunos de los grandes modistos del momento: Balenciaga, Nina Ricci, Maggy Rouff, Philippe Venet, Pierre Cardin, Courrèges y Givenchy.
La actriz y cantautora Françoise Hardy fue musa del modisto
Su faceta como artista plástico también encontró pronto reconocimiento, cuando en 1963 fue premiado en la Bienal de París por una escultura para jardín, expuesta en el Museo de Arte Moderno.
El metalúrgico de la moda
Y es que toda la década de los 60 fue para Rabanne una época de experimentación en la que se olvidó de la aguja y los tejidos para crear a base de soplete, tenazas y metales diversos. No en vano Coco Chanel le llamó “metalúrgico de la moda”.
Las soldaduras, los remaches y los vulcanizados se aliaban con tejidos de papel, plástico o metal para dar lugar a modelos futuristas, que venían a ensalzar el poder femenino, la mujer luchadora, armada y protegida con corazas como una guerrera.
Curioso encuentro de un joven Rabanne, con Hardy y Salvador Dalí
En 1965 crea la colección PacoTille, con accesorios de todo tipo, como pendientes o gafas, en colaboración con Michèle Rosier, Christiane Bailly y Emmanuelle Khan, los estilistas más top del prêt-à-porter del momento. De esta forma transgresora y valiente, nació la firma Paco Rabanne.
El 1 de febrero de 1966 presenta su primera colección Manifiesto 3, en el legendario Hôtel George V de París. La colección exhibe doce vestidos realizados con discos y placas de Rhodoid (acetato de celulosa que se obtiene de elementos vegetales; y es, a diferencia del plástico, un material totalmente ecológico).
Imagen del primer desfile Rabanne
Unos meses después, el 21 de abril, Rabanne presenta una segunda colección de trajes de baño también realizados con Rhodoid, y en septiembre nuevos materiales se incorporan a sus diseños: cuero ribeteado, plumas de avestruz y aluminio.
Inagotable impulso experimentador
Y de esta forma experimental y vanguardista continúa los siguientes tres años, con creaciones verdaderamente revolucionarias, que impactan y encantan por igual: vestidos de papel, modelos de cuero fluorescente, metal martillado, punto de aluminio y piel tricotada. Ningún material es lo suficientemente extraño como para no crear un diseño con él.
Jane Fonda, espectacular vestida por Rabanne para Barbarella
Es realmente ingente su capacidad creativa en esos años, es como si Paco no pudiera parar de innovar: trajes/joya, realizados con placas de oro y diamantes engastados (como el lucido por la maravillosa actriz Françoise Hardy); prendas ajustadas “Giffo” y vestidos hechos de botones.
Otra colección realmente especial fue la de los “Rob’auto”, un prêt-à-porter especialmente diseñado para la conducción de automóvil.
Audrey Hepburn en Dos en la carretera
En paralelo, Rabanne hace también diseños de vestuario para películas como Les aventuriers (Tres aventureros, dirigida por Robert Enrico en 1967); Barbarella, de Roger Vadim (1968) y los vestidos de Audrey Hepburn en Two for the Road (Dos en la carretera, de Stanley Donen, en 1967).
Explora otras posibilidades de la costura tradicional: los tejidos con flecos, los desgarrados o retejidos, y propone curiosas transformaciones de prendas.
Ante tanto talento, muchos museos no se resisten a exhibir y adquirir sus creaciones adquiridas. Así, el MoMA de Nueva York atesora algunos de sus más significativos diseños.
Calandre, el primer perfume creado por el modisto
Lanzamiento de su audaz línea de perfumes
El proyecto empresarial Rabanne no deja de crecer y en 1969 se expande al firmar una colaboración con el grupo español Puig. Así nació su primer perfume femenino “Calandre”; el masculino tendrá que esperar hasta 1973, cuando lanza “Paco Rabanne pour Homme”.
Y sigue experimentado. Explora otras posibilidades de la costura tradicional: los tejidos con flecos, los desgarrados o retejidos, y propone curiosas transformaciones como los vestidos que nacen de los pañuelos de Cholet, o los calcetines que se convierten en mangas de suéter.
Además, su desbordante imaginación le conduce a realizar prendas más teatrales e icónicas, introduciendo máscaras, corpiños y chalecos ceñidos de plástico.
La línea de prêt-à-porter masculino fue lanzada en 1976, y en ella sigue enriqueciendo sus diseños con nuevos materiales, que además presentan un tratamiento muy poco convencional: tejidos luminiscentes, papeles metalizados, ante calado, trenzado de metal, cortinas de abalorios de madera…
Uno de los modelos llamados “trajes/joya”
Sus materiales y tratamientos son muy poco convencionales: tejidos luminiscentes, papeles metalizados, ante calado, trenzado de metal, cortinas de abalorios de madera…
Las formas también sorprenden, como el peto con hombreras de metal martillado articulado, las chaquetas esculpidas en piel, los abrigos cometa, los jubones de cota de malla y los zapatos “de punta curvada”.
A partir de 1990, vuelve al prêt-à-porter femenino sin parar de innovar. Las prendas presentan efectos luminosos y volúmenes esculturales: discos con efecto espejo, plexiglás, reflejos láser, fibra óptica, nylon y hasta nácar… En 1996 sus elecciones se decantan por el respeto al medio ambiente y opta por elementos más ecológicos.
Rabanne también triunfó en la línea prêt-à-porter
Su inconformismo y audacia se trasladaron también a sus perfumes. En 1999 nació “Ultraviolet”, con un color y frasco inéditos, que causaron verdadera sensación. Del 2001 a 2009 creó “Ultraviolet Man”, “Black XS” y “Black XS pour Elle” 8. Pero quizá el de mayor éxito fue “1 Million”, ligado a la fabulosa campaña televisiva que lo lanzó.
El grupo Puig adquiere la firma, y Paco Rabanne abandona la alta costura y también, progresivamente, la moda en general.
La Casa Rabanne de París
Con el cambio de siglo, el grupo Puig adquiere la firma, y Paco Rabanne abandona la alta costura y también, progresivamente, la moda en general. La casa Rabanne se volvió a las colecciones de prêt-à-porter no sin éxitos. 2015 fue el año de la apertura de tienda propia en París, en el 39 de la exclusivísima Avenida Montaigne. Se trata de la tienda insignia de Rabanne, un espacio inmersivo que celebra la moda, el diseño y la artesanía de este creador total que fue el “metalúrgico de la moda”.
Artista total
Y es que Rabanne fue mucho más que un modisto de vanguardia; también fue pintor y diseñador, y llegó a exponer sus obras pictóricas en Valbonne. También diseñó una colección de seis sillas inspiradas en sus célebres texturas. En fin, fue un artista total, sin miedos ni prejuicios. Algunas de sus creaciones pueden verse en numerosos museos (Museo del Traje en Madrid y Arte Moderno de Nueva York, entre otros).
Su trabajo ha sido altamente reconocido internacionalmente. Entre muchos otros premios, en España recibió la insignia de oficial de la Orden de Isabel la Católica y en 2001 la Medalla de Oro al Mérito de las Bellas Artes.
Rabanne falleció el 3 de febrero de 2023, en su casa de Portsall (Francia), a los 88 años de edad.
“Elegido”