Mundo Yold. Charles Lindbergh: héroe americano y controversia

Charles Lindbergh: una vida de luces y sombras

Carmen Matas
25 agosto, 2024

Hoy en Gente Yold, recordamos la vida de Charles Lindbergh, un hombre que se convirtió en la encarnación del “héroe americano” y cuya vida fue marcada por la tragedia y la controversia. A medio siglo de su fallecimiento, el 26 de agosto de 1974, exploramos los altos vuelos y las sombras que definieron a este ícono de la aviación.

Nacido el 4 de febrero de 1902 en Detroit, Charles Lindbergh se elevó a la fama mundial a los 25 años, cuando realizó el primer vuelo en solitario sin escalas a través del Atlántico. Partiendo de Nueva York y aterrizando en París, el 20 de mayo de 1927, Lindbergh se convirtió instantáneamente en un héroe. Su avión, el “Spirit of St. Louis”, y su audaz hazaña capturaron la imaginación de una nación necesitada de esperanza y aventura. Este logro monumental no solo destacó su habilidad y valentía, sino que también simbolizó el espíritu de innovación y exploración de una América emergente.

Sin embargo, la vida de Lindbergh no estuvo exenta de dolor y controversia. En 1932, su primer hijo fue secuestrado y asesinado, un crimen que conmocionó al mundo y llevó a un mediático juicio que capturó la atención global. Este evento trágico sumió a Lindbergh y a su esposa, Anne Morrow Lindbergh, en un profundo dolor del que nunca se recuperarían por completo. A pesar del tiempo, el secuestro del hijo de Lindbergh sigue siendo uno de los crímenes más infames en la historia de Estados Unidos, una mancha indeleble en la vida de un héroe nacional.

Discurso de Charles Lindberg en un mitin de America First Comittee.

Lindbergh también es recordado por sus polémicas opiniones políticas. Durante la década de 1930, expresó su apoyo a la Alemania nazi y se convirtió en un prominente portavoz del movimiento aislacionista en Estados Unidos. Su involucramiento con el Comité de América Primero y sus comentarios percibidos como antisemitas dañaron su reputación. Aunque sus contribuciones a la aviación y la exploración científica son innegables, estas posiciones políticas oscurecieron su legado y provocaron un amplio debate sobre su figura histórica.

El 20 de mayo de 1927, con solo 25 años, se elevó a la fama mundial, cuando realizó el primer vuelo en solitario sin escalas a través del Atlántico

Una vida que, sin lugar a dudas, no deja indiferente. En el 50 aniversario de su fallecimiento, acompáñanos a conocer más detalles:

El héroe de la aviación

Charles Lindbergh, con su hazaña de 1927, abrió un nuevo capítulo en la aviación y se consagró como una leyenda. Su vuelo sin escalas desde Nueva York a París no solo fue una proeza técnica, sino un símbolo del potencial humano para superar desafíos aparentemente insuperables. Con 33 horas y media de vuelo, sin radio ni instrumentos de navegación modernos, Lindbergh demostró una resistencia y valentía extraordinarias. La travesía no fue solo una hazaña personal; marcó el inicio de una nueva era en la aviación comercial y militar, consolidando a Estados Unidos como un líder en la industria aeroespacial.

Lindbergh, un joven piloto del Servicio Aéreo del Ejército de los Estados Unidos, no era ajeno a los riesgos de la aviación. Años antes de su vuelo transatlántico, había trabajado como piloto de correo aéreo, enfrentándose a condiciones climáticas adversas y a menudo arriesgando su vida para cumplir con sus deberes. Esta experiencia forjó su destreza y determinación, cualidades que lo prepararían para el desafío más grande de su carrera.

Tragedia familiar

Pero tras el éxito, la vida de Lindbergh basculó. El 1 de marzo de 1932, cuando su primer hijo -de los 12 que tendría- contaba con tan solo 20 meses, la vida de la familia Lindbergh cambiaría para siempre. Aquella noche, mientras Lindbergh leía en la biblioteca, la niñera acostó al niño en su cuna en el piso superior de la casa. Cerca de las diez de la noche un ruido sorprendió a Lindbergh, pero supuso que se debía a la caída de una caja de naranjas en la cocina, por lo que no le dio importancia. Media hora más tarde, la niñera descubrió con horror que el niño no estaba en su cuna. Tras buscar por toda la casa, Lindbergh encontró un sobre en el alféizar de la ventana.

La vida de Lindbergh no estuvo exenta de dolor y controversia. En 1932, su primer hijo fue secuestrado y asesinado, un crimen que conmocionó al mundo

Dentro del sobre había una nota escrita en un muy mejorable, que expertos lingüistas confirmaron que había sido escrita por un alemán. La nota exigía 50.000 dólares en certificados de oro a cambio de la liberación del niño. La desaparición del bebé se convirtió en una tragedia nacional, movilizando a toda la nación en su búsqueda. Desde el presidente Herbert Hoover hasta el gánster Al Capone, quien ofreció su ayuda desde la cárcel, se unieron a los esfuerzos para encontrar al pequeño Charles.

 

En medio de la desesperación, un profesor jubilado llamado Joseph Condon publicó un mensaje en el periódico, ofreciendo mil dólares a los secuestradores si devolvían al niño sano y salvo. Sorprendentemente, Condon recibió una respuesta de los secuestradores, firmada por un tal “John”. A pesar de la extrañeza de la situación, Lindbergh, desesperado por recuperar a su hijo, aceptó la intermediación de Condon. Este afirmó haber tenido contacto con un marinero escandinavo, parte de una banda que supuestamente tenía al niño. Para demostrar que realmente lo tenían, entregaron un pijama del pequeño, que Lindbergh reconoció de inmediato, autorizando así el pago del rescate. No obstante, los secuestradores no devolvieron al bebé, y más de dos meses después, un camionero encontró el cadáver del niño en un bosque cercano.

Bruno Richard Hauptmann

La policía centró su investigación en rastrear los números de serie de los certificados de oro entregados como rescate. Después de dos años de intensas pesquisas, arrestaron a Bruno Richard Hauptmann, un carpintero alemán y exconvicto. Hauptmann fue juzgado en 1935, declarado culpable de infanticidio y condenado a la silla eléctrica. A pesar de su condena, Hauptmann mantuvo su inocencia hasta el final, dejando un velo de misterio sobre uno de los crímenes más infames de la historia de Estados Unidos.

Controversia política

El apoyo de Lindbergh al nazismo y su postura aislacionista durante la Segunda Guerra Mundial son capítulos oscuros en su vida. Sus discursos en el Comité de América Primero y su admiración por la Alemania nazi provocaron indignación y controversia. Estos aspectos de su vida han sido objeto de debate y revaluación histórica, complicando la imagen de un hombre que, en su momento, fue un símbolo de todo lo que América aspiraba a ser.

El apoyo de Lindbergh al nazismo y su postura aislacionista durante la Segunda Guerra Mundial también son capítulos oscuros en su vida

Lindbergh visitó Alemania en varias ocasiones durante la década de 1930 y quedó impresionado por los avances tecnológicos y la organización de la Luftwaffe. Llegó incluso a ser condecorado por el propio Hitler. Su opinión favorable sobre el régimen nazi, junto con sus críticas a la intervención estadounidense en la guerra, lo posicionaron como una figura divisiva. En 1941, en un discurso notorio en Des Moines, Iowa, Lindbergh insinuó que los “británicos, los judíos y la administración de Roosevelt” estaban empujando a Estados Unidos hacia la guerra, un comentario que fue ampliamente condenado como antisemita.

Doble vida

Un aspecto menos conocido de la vida de Lindbergh es su doble vida amorosa. Durante décadas, Lindbergh mantuvo relaciones extramaritales con tres mujeres alemanas: Brigitte Hesshaimer, Marietta Hesshaimer y Valeska, con quienes tuvo un total de siete hijos. Estas relaciones permanecieron ocultas incluso de su esposa, Anne Morrow Lindbergh, hasta después de su muerte en 1974. La revelación de esta doble vida salió a la luz en 2003, cuando Astrid Bouteuil y Dyrk Hesshaimer, dos de los hijos de Brigitte Hesshaimer, presentaron pruebas de ADN confirmando a Lindbergh como su padre.

Durante décadas, Lindbergh mantuvo relaciones extramaritales con tres mujeres alemanas con quienes tuvo un total de siete hijos

Lindbergh conoció a Brigitte Hesshaimer en 1957, una joven alemana que trabajaba como sastre. Pronto comenzó una relación con ella, visitándola regularmente bajo el seudónimo de “Careu Kent”. Con el tiempo, esta relación llevó al nacimiento de tres hijos: Dyrk, Astrid y David. Paralelamente, Lindbergh también mantenía una relación con Marietta Hesshaimer, la hermana de Brigitte, con quien tuvo otros dos hijos. La tercera mujer, Valeska, era una pintora con la que tuvo dos hijas más. Lindbergh mantenía estas visitas en secreto, viajando frecuentemente a Europa bajo diferentes identidades y justificando sus ausencias a su familia en Estados Unidos como viajes de negocios o relacionados con su trabajo en la conservación ambiental.

Junto a Brigitte Hesshaimer

Estas revelaciones han añadido una capa de complejidad a la figura de Lindbergh, mostrándolo como un hombre con una vida privada radicalmente diferente a su imagen pública. Sus hijos alemanes relatan que Lindbergh era un padre atento y cariñoso, aunque siempre mantenía su identidad verdadera oculta.

Vida después de la fama

Después de su vuelo transatlántico y las tragedias personales, Lindbergh buscó una vida más tranquila y privada. Se trasladó a Europa con su familia en un intento por escapar del constante acoso de la prensa estadounidense. Durante la Segunda Guerra Mundial, aunque inicialmente era un opositor vocal a la intervención estadounidense, Lindbergh finalmente apoyó el esfuerzo bélico y trabajó como consultor técnico y piloto de prueba para las Fuerzas Aéreas del Ejército de los Estados Unidos.

En los años posteriores a la guerra, Lindbergh se dedicó a la conservación ambiental y la defensa de los recursos naturales. Su libro The Spirit of St. Louis, publicado en 1953, ganó el Premio Pulitzer, consolidando su legado como un escritor talentoso además de aviador. Sin embargo, su vida personal continuó siendo un tema de fascinación y controversia.

La vida de Charles Lindbergh es un testimonio de los altibajos de la fama y la complejidad de la naturaleza humana. Su heroísmo en el aire y su trágica pérdida personal resonaron profundamente en el corazón de una nación. Sin embargo, sus opiniones políticas y su vida personal complicada añadieron matices oscuros a su legado. Hoy, a 50 años de su fallecimiento, recordamos a Lindbergh no solo como un pionero de la aviación, sino también como una figura compleja y a menudo contradictoria.

Su historia nos recuerda que incluso los héroes más grandes tienen defectos y que la vida está llena de desafíos imprevistos. En última instancia, la vida de Lindbergh sigue siendo una lección sobre la tenacidad, la ambición y las inevitables sombras que acompañan a la luz del éxito.

¿Conocías a Charles Lindbergh? ¿Sabías que fue una figura clave en el desarrollo de la aviación pero también un personaje político controvertido? No dudes en compartir tus pensamientos con nosotros a través de los comentarios o en cualquiera de nuestras plataformas sociales. ¡Nos vemos muy pronto!

Comentarios

  1. Ines dice:

    No conocía la historia tan detallada de este hombre, por cierto muy interesante su vida

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