Mundo Yold. 80 aniversario de las ejecuciones de los integrantes de La Rosa Blanca
La Rosa Blanca: los alemanes que intentaron derrocar a Hitler

Los grupos de resistencia entraron en acción durante la Segunda Guerra Mundial para desafiar al tiránico gobierno nazi. Hoy te hablamos de La Rosa Blanca, un grupo formado por estudiantes que se propuso denunciar a Hitler, e instar a la resistencia pasiva.
Esta semana se cumplen 80 años de la ejecución en Munich de los estudiantes alemanes que lideraron con valentía un importante movimiento de resistencia contra Hitler. Desde entonces, los miembros del grupo La Rosa Blanca, como se denominaban, se convirtieron en auténticos héroes nacionales alemanes. El movimiento estaba liderado por los hermanos Sophie y Hans Scholl. Junto a ellos había otros estudiantes como Christoph Probst, Willi Graf y Alexander Schmorell. El profesor Kurt Huber se uniría al grupo más tarde por recomendación de Sophie Scholl.
En 1943, con la Segunda Guerra Mundial en pleno apogeo, un grupo de estudiantes decidió iniciar una campaña de resistencia pasiva en Munich, el centro del poder nazi.
En 1943, con la Segunda Guerra Mundial en pleno apogeo, un grupo de estudiantes decidió iniciar una campaña de resistencia pasiva en Munich, el centro del poder nazi.
Una de sus integrantes, Liselotte Furst-Ramdohr, viuda con tan solo 29 años tras la muerte de su marido en el frente ruso, fue presentada al grupo de la Rosa Blanca a través de su amigo, Alexander Schmorell. Fue la única integrante del grupo que pudo contar su experiencia años después. En concreto lo hizo con 99 años, a través de unas declaraciones para el medio británico BBC: “Todavía puedo ver hoy a Alex en el momento en el que me lo contó”, aseguró. “Nunca dijo la palabra ‘resistencia’, solo dijo que la guerra era terrible, con los enfrentamientos y tanta gente muriendo, y que Hitler era un megalómano, así que tenían que hacer algo”.
Panfletos repartidos para llamar a la resistencia
Unos jóvenes muy valientes
Schmorell y sus amigos Christoph Probst y Hans Scholl habían comenzado a escribir panfletos alentando a los alemanes a unirse a ellos para resistir al régimen nazi. Con la ayuda de un pequeño grupo de colaboradores, repartieron los panfletos en direcciones seleccionadas al azar en la guía telefónica. La Rosa Blanca repartía los panfletos en mano en el área de Munich y también los enviaba a otras ciudades a través de mensajeros de confianza.
La Rosa Blanca repartía los panfletos en mano en el área de Munich y también los enviaba a otras ciudades a través de mensajeros de confianza.
La intención de estos panfletos era informar al público alemán, en general y a los compañeros universitarios, en particular sobre las fechorías cometidas por el Partido Nazi e instar a la resistencia. Asimismo, tuvieron la valentía de escribir “Abajo Hitler” en algunos muros de la ciudad alemana durante la noche.
Uno de los miembros más conocidos del grupo en la actualidad es la hermana menor de Hans Scholl, Sophie. En 2005 se hizo una película sobre ella, Los últimos días, que llegó a estar nominada al Oscar. “Aunque era muy valiente lo que hacían, tanto Sophie como su hermano Hans tenían mucho miedo. Aún así querían seguir luchando por Alemania, amaban a su país”, afirmó Liselotte Furst-Ramdohr en su entrevista a la BBC.
Sexta y última misión
El 18 de febrero, Hans y Sophie Scholl emprendieron su expedición más atrevida hasta el momento. Querían distribuir masivamente copias de un texto, el que resultaría ser el último de los panfletos. Querían hacerlo en la Universidad de Munich, donde los estudiantes los encontrarían cuando salieran de sus clases.
Fotograma de la película La Rosa Blanca
Los hermanos Scholl fueron declarados culpables y ejecutados en la guillotina, junto con su amigo y colaborador Christoph Probst, el 22 de febrero de 1943.
Los hermanos dejaron montones de folletos alrededor de la escalera central. Pero cuando llegaron a la parte superior, a Sophie todavía le quedaban varios en la mano y decidió arrojarlos desde la barandilla. Todos volaron por los aires sobre los estudiantes. Un vigilante de la universidad se puso inmediatamente en contacto con la Gestapo. Cuando llegaron, Hans Scholl todavía tenía una copia del panfleto en el bolsillo.
Ambos hermanos fueron arrestados y juzgados en una sesión de emergencia del Tribunal Popular. Fueron declarados culpables y ejecutados en la guillotina, junto con su amigo y colaborador Christoph Probst, el 22 de febrero de 1943. Las últimas palabras de Hans Scholl antes de ser ejecutado fueron: “¡Viva la libertad!”.
Hans y Sophie Scholl
Tras la rápida y atroz condena de los hermanos, el resto del grupo de la Rosa Blanca entró, por supuesto, en pánico. Alexander Schmorell acudió a sus contactos para cambiar rápidamente de aspecto físico y hacerse un pasaporte falso. Intentó huir a Suiza, pero las fuertes nevadas le obligaron a retroceder. Al regresar a Munich, fue capturado después de que una ex novia le reconociera entrando en un refugio antiaéreo durante un bombardeo. Fue arrestado y posteriormente ejecutado.
En el otoño de 1943, aviones aliados lanzaron millones de copias del último panfleto de la Rosa Blanca sobre Alemania.
¿Y que ocurrió con la miembro del grupo que concedió la entrevista a la BBC? Lo cierto es que Lilo Furst-Ramdohr también fue arrestada el 2 de marzo de 1943: “Dos hombres de la Gestapo vinieron al piso y lo pusieron todo patas arriba”, dijo en la entrevista. “Revisaron mis cartas, y luego uno de ellos me ordenó que les acompañara”.
Furst-Ramdohr pasó un mes bajo custodia de la Gestapo. La interrogaban regularmente sobre su rol dentro del grupo de la Rosa Blanca, pero finalmente la liberaron sin cargos. Un golpe de suerte que atribuye a su condición de viuda de guerra. Después de su liberación, la policía secreta la siguió durante algún tiempo.
El último panfleto, rescatado por los aliados
El último folleto de la Rosa Blanca pudo salir de Alemania a través de artimañas de contrabando e interceptado por las fuerzas aliadas. Así, en el otoño de 1943, aviones aliados lanzaron millones de copias del mismo sobre Alemania.
Werner y Sophie Scholl
Desde el mismo momento en que la guerra finalizó, los miembros de la Rosa Blanca se convirtieron en célebres figuras, con el ahínco de la sociedad alemana de buscar figuras positivas de referencia, después de la mancha que supuso en su historia la trágica trayectoria del dictador Hitler. De hecho, Alexander Schmorell llegó a ser incluso santificado por la iglesia ortodoxa rusa en 2012.
Dos meses después de que terminara la guerra, empezaron las primeras conmemoraciones: numerosas escuelas y calles de Alemania recibieron el nombre de los miembros del grupo, también se colocó un monumento en la Universidad de Munich. Actualmente, otros lugares como el Palacio de Justicia de Munich también albergan monumentos conmemorativos dedicados a los miembros del grupo.
Preciosa imagen de la valiente Sophie
Los integrantes de la Rosa Blanca fueron individuos decididos e inteligentes. Pusieron su vida en juego, y la mayoría la perdieron en su intento de que la sociedad alemana pudiera ser consciente de la maldad y la corrupción del partido nazi. Mientras muchos alemanes daban la espalda a los incontables asesinatos de judíos, la Rosa Blanca desafió valientemente a Hitler y su malicioso gobierno, tomando partido e informando al público con sus panfletos.
¿Conocías la historia de la Rosa Blanca? ¿Sabías que la mayoría de ellos fueron ejecutados? No dudes en compartir tus sensaciones con nosotros a través de los comentarios o en alguna de nuestras redes sociales. ¡Nos vemos muy pronto!
En portada: Hans Scholl, Sophie Scholl y Christoph Probst (1920)
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